
Fernanda Neil era un pimpollo (turín, turín) cuando dio sus primeros pasos como actriz, en Chiquititas. Pero un día, ese brote de mañana, semilla que estalla… estalló. Y la ex Cris Morena se convirtió en la espectacular morocha que hoy cosecha suspiros en la casa de Gran Hermano Famosos. La que mientras sobrevive a las nominaciones, se anima a desfiles hot. La que, libre de prejuicios y mal que le pese a su novio, un día se recostó sobre el piso boca abajo y, ya sin el corpiño, se entregó a los masajes de Pablo Tamagnini, otro que también dejó a su pareja sufriendo por tevé. La que definitivamente se olvidó de las cámaras cuando se animó a simular poses del Kamasutra con Carlitos Nair en la cama. Y que luego, cuando se acordó de que las infrarrojas seguían ahí, dijo resignada: “Después de esto ya no vuelvo a casa”. Pero esta Fernanda (24) que hoy ratonea a todo un país, ya había asombrado a propios y extraños con variados desnudos en Doble Vida, una de las ficciones más jugadas y provocadoras que se recuerdenen un canal de aire.Allí interpretó a una prostitutaque trabajaba en el burdel de Moria Casán, y tuvo escenas de altísimo voltaje erótico con Juanita Viale y Guillermo Pfeining, entre otros. Dos años después, la carrera la puso ante su máximo desafío: participar del reality show más famoso del mundo. Y antes de entrar a la Casa, posó con toda su sensualidad a cuestas para la lente de Paparazzi, y dejó su testimonio.
La nota completa en Revista Paparazzi de esta semana o en su web.